La jerarquía de la Orden de los Asesinos en Assassin’s Creed

La jerarquía de la Orden de los Asesinos en Assassin's Creed

La jerarquía de la Orden de los Asesinos en Assassin’s Creed es un elemento fundamental en la trama de esta popular serie de videojuegos. A lo largo de las diferentes entregas, los jugadores se sumergen en un mundo lleno de intrigas, conspiraciones y poder, donde la estructura de mando de los Asesinos desempeña un papel crucial. Descubre cómo se organiza esta enigmática orden, quiénes son sus principales líderes y cómo influyen en el desarrollo de la historia. Sumérgete en un universo de secretos y lealtades enfrentadas, donde cada decisión puede cambiar el rumbo de la eterna lucha entre los Asesinos y los Templarios. ¡Prepárate para adentrarte en un viaje épico a través de la jerarquía de los Asesinos en Assassin’s Creed!

La Orden de los Asesinos: Origen e historia

La Orden de los Asesinos, también conocida como los Hashshashin, fue una secta secreta islámica que tuvo su origen en el siglo XI en Persia. Se destacaron por llevar a cabo asesinatos selectivos contra figuras políticas y militares que consideraban una amenaza para su causa. El término «asesino» proviene del árabe «hashshashin», que significa «consumidor de hachís», en referencia a la supuesta práctica de consumir hachís antes de llevar a cabo sus actos.

**Origen:**
La Orden de los Asesinos fue fundada en 1090 por Hassan-i Sabbah, un líder religioso y místico persa. Estableció su base en la fortaleza de Alamut, en las montañas de Elburz, en la actual Irán. Desde allí, los Asesinos extendieron su influencia a través de una red de fortalezas en Persia y Siria.

**Métodos:**
Los Asesinos fueron conocidos por su técnica de asesinato selectivo mediante sicarios. Utilizaban el sigilo, la infiltración y la sorpresa para llevar a cabo sus acciones. Se ganaron una reputación temible al eliminar a varios líderes políticos, militares y religiosos prominentes de la época.

**Declive:**
A lo largo de los siglos, la Orden de los Asesinos perdió poder y territorio debido a las presiones de las fuerzas musulmanas y cristianas. La fortaleza de Alamut fue finalmente destruida en 1256 por los mongoles, lo que marcó el fin de la influencia de los Asesinos en la región.

En la actualidad, la Orden de los Asesinos sigue siendo objeto de interés en la cultura popular, destacando su legado de misterio, intriga y habilidades asesinas. Su historia ha sido objeto de numerosas obras literarias, artísticas y cinematográficas que han contribuido a mantener viva su memoria en la conciencia colectiva.

La Orden de los Templarios en Assassin’s Creed

En la saga de videojuegos Assassin’s Creed, la Orden de los Templarios, también conocida como los Caballeros Templarios, desempeña un papel central en la trama. Los Templarios son presentados como una organización secreta y poderosa que busca controlar la humanidad a través del uso de artefactos antiguos conocidos como Piezas del Edén. A lo largo de los juegos, los Templarios son los principales antagonistas de la Hermandad de los Asesinos, quienes luchan para proteger la libre voluntad de la humanidad.

En Assassin’s Creed, los Templarios son retratados como una facción que busca imponer el orden a través del control, utilizando métodos a menudo cuestionables para lograr sus objetivos. A lo largo de la historia, los jugadores se enfrentan a varios personajes emblemáticos que pertenecen a la Orden de los Templarios, como el Gran Maestre Rodrigo Borgia y Haytham Kenway.

La lucha entre los Templarios y los Asesinos es un tema recurrente en la saga Assassin’s Creed, ya que ambos bandos tienen visiones opuestas sobre cómo debe ser la interacción entre la humanidad y la tecnología de los Primeros Civilizadores. Mientras que los Templarios creen en el control para garantizar la estabilidad y el progreso, los Asesinos abogan por la libertad y la autonomía individual.

Orígenes de la Orden de los Asesinos en Assassin’s Creed

La Orden de los Asesinos, también conocida como los Asesinos, es una organización ficticia presente en la franquicia de videojuegos «Assassin’s Creed». Su origen se remonta a la antigua Persia durante el siglo XI, en el periodo de las Cruzadas. Aunque en el juego se le atribuye una antigüedad aún mayor, sus raíces históricas se encuentran en la secta ismaelita de los nizaríes, una rama del chiismo ismaelita.

Los nizaríes eran seguidores del líder religioso Hasan-i Sabbah, quien fundó la fortaleza de Alamut en el año 1090. Desde esta fortaleza, los nizaríes llevaban a cabo operaciones de asesinato selectivas contra figuras políticas y militares consideradas como enemigos de su fe. La palabra «asesino» proviene de la palabra árabe «hashshashin», que hace referencia al uso de drogas alucinógenas por parte de los seguidores de la secta.

Algunos puntos clave sobre los orígenes de la Orden de los Asesinos en Assassin’s Creed:

  • Los Asesinos eran conocidos por su habilidad en el sigilo, el combate y la infiltración.
  • Se dice que los miembros de la Orden de los Asesinos recibían entrenamiento riguroso desde jóvenes para convertirse en maestros asesinos.
  • La filosofía de los Asesinos se basaba en la creencia de que a través del caos y la discordia se podía alcanzar la paz.

En el universo de «Assassin’s Creed», la Orden de los Asesinos y sus eternos rivales, los Templarios, se encuentran en constante conflicto por el control de artefactos antiguos y el destino de la humanidad. A lo largo de la historia, los Asesinos han sido representados como defensores de la libertad y la independencia, dispuestos a luchar contra la opresión y la tiranía en todas sus formas.

La jerarquía de la Orden de los Asesinos en Assassin’s Creed se basa en un sistema piramidal, con un líder supremo en la cúspide conocido como Mentor. Bajo él, se encuentran los Maestros Asesinos, responsables de dirigir las diferentes ramas de la Orden en distintas regiones. A continuación, se sitúan los Asesinos, quienes ejecutan las misiones encomendadas por sus superiores y llevan a cabo la lucha contra los Templarios. Por último, están los Novicios, quienes están en proceso de formación y aprendizaje para convertirse en Asesinos de pleno derecho. Esta estructura jerárquica garantiza la cohesión y eficacia de la Orden de los Asesinos en su lucha contra la opresión y la injusticia.